Las mafias políticas que se complotaron contra la reelección de Manuel y orquestaron, además de los errores del equipo del entonces alcalde, un fraude colosal, secuestrando incluso las urnas y llevándoselas para el distrito, fueron entonces por las cabezas de los regidores que este impulsó.
Manuel impulsó unos 15 candidatos, mientras que el actual alcalde, uno y medio, aun cuando algunos de ellos hoy parece que no tienen nada que agradecer.
No se pudo impedir el paso de regidores y regidoras a quienes se les hizo la guerra brutal y, claro, en la circunscripción 3, Simanca, como candidato a diputado, era el principal objetivo.
Se hizo de todo para sacarlo de la boleta. La conspiración venía de las mismas entrañas de las castas políticas del PRM, que ya se habían anotado una contra el entonces alcalde, pero el liderazgo es difícil de tumbar, y los de Manuel, empoderados y con la experiencia reciente, pudieron hacer frente al complot de las mafias políticas.
En el Día D, solo en un acta, le habían quitado 20 votos y colocado a quien no sacó ni uno… las mafias electorales actuaron hasta los últimos momentos, la orden era: NADIE DE MANUEL… pero no lo pudieron evitar.
Este capítulo de Simanca es un claro ejemplo de cuán incrustados están los mafiosos de la política en el sistema electoral, que hay que salir como ejército para evitar que quiten votos, que destruyan candidaturas.
Todo comienza ahora. Simanca es diputado; es la gran derrota a todo lo perverso que convive, como pus, en la sangre de los partidos políticos y signo de que las nuevas generaciones les toca cambiar para que mañana los nuevos candidatos no tengan que enfrentarse a castas de partidos que mal usan el poder para cortar el camino a los que no son suyos y colocar a lo peor del mundo político.
El futuro de Simanca, cuán buen diputado será, pertenece a otras historias, pues él tiene claro que sus enemigos están ahí, con mucho más poder, y para luchar contra ellos no queda más que el fortalecimiento de las bases que lo llevaron hasta aquí y representar al municipio día y noche, reuniendo a su alrededor todo lo que tiene que ser cambiado o construido para que esto termine de sacar el lastre podrido de las mafias políticas que, como sanguijuelas, chupan la política dominicana.